Criados bajo la lógica del touch y rodeados de dispositivos tecnológicos, su mirada se centra hacia un mundo que acontece entre las redes y los smartphones. Según el estudio de la UNICEF Argentina, Chic@s conectados, en la actualidad existen más de 13 millones de niños, niñas y adolescentes. Seis de cada 10 se comunican usando celular y 8 de cada 10 usan Internet para consultar información o ver películas y series.
Claramente la tecnología es parte de su existencia, impacta en sus modos de conocer, aprender, expresarse, divertirse y comunicarse.Esta comunidad anticipa ser la más “transformadora”, aprende lo bueno y malo del Internet a partir de su propia experiencia. Por lo cual, también son llamados los nuevos prosumer (productores/consumidores). Producen contenido sobre un producto, esto puede ir desde construir una opinión a subir un video tutorial.
Sus seguidores y sus influencers son youtubers que determinan comportamientos y pautas de consumo y facilitan el proceso de compra a sus padres al ser ellos los directos decisores. Para las marcas esta generación se ha vuelto difícil de convencer. Según los especialistas, “lo quieren todo, lo quieren ya, lo tienen, se aburren y quieren otra cosa”.
Sin embargo, la aplicación para comidas Sin Delantal logró impactar en su “top of mind” al mostrar como protagonista a una niña, en la cual un repartidor de la plataforma entrega a una pequeña un pedido que pagó con sus ahorros.